La nueva aerolínea militar mexicana empezará a operar a fin de año con asesoramiento técnico y comercial de la compañía Boeing a la que el Ejército le rentará 10 aviones para cubrir 20 rutas nacionales con boletos baratos.
Así lo explicó el jueves el secretario de la Defensa, Luis Cresencio Sandoval, en la conferencia presidencial matutina.
La nueva apuesta comercial del Ejército supondrá un nuevo impulso a la militarización del sector de la aviación en el país ya que actualmente l as Fuerzas Armadas controlan los dos principales aeropuertos de la capital y los militares están construyendo varios aeródromos más, una estrategia que, según Saldoval, se prevé sea rentable económicamente para 2030.
No obstante, Sandoval reconoció que parte de esa rentabilidad dependerá del éxito que tanto las infraestructuras como la aerolínea tengan entre los viajeros.
El nuevo aeropuerto de la Ciudad de México, el Felipe Ángeles -que fue construido y es operado por militares- es muy poco usado porque está muy lejos del centro de la ciudad y mal comunicado.
Sin embargo, será ahí donde la nueva aerolínea tendrá una de sus sedes -la otra estará en el aeropuerto de Tulum, que está siendo construido también por militares-. Desde la capital prevé volar a algunos de los destinos más turísticos del país, como Cancún o Los Cabos.
El proyecto supondrá una inversión inicial de más de 250 millones de dólares, 50 de los cuales estarán destinados a la compra de la marca “Mexicana de Aviación”, una aerolínea que quebró en 2010. Esos 50 millones servirán para indemnizar a casi 7.500 trabajadores que quedaron afectados desde entonces, indicó la secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde.
Según el jefe del Ejército, la nueva aerolínea activará la economía y creará 209 empleos directos, aunque no aclaró si serían de militares o de civiles. También dijo que “al emplear la estructura del Estado mexicano” se logrará que los boletos sean en torno a un 20% más baratos que los de mercado.
La renta de los 10 aviones Boeing 737-800, que tienen capacidad para 180 pasajeros, incluirá la tripulación.
Desde que llegó al poder en 2018 el presidente Andrés Manuel López Obrador ha multiplicado las labores y el poder de los militares en tareas como la seguridad, el control de la inmigración y los puertos, la cría de árboles, la construcción de grandes infraestructuras como el turístico Tren Maya o la gestión de un ferry también turístico para visitar lo que fue una antigua cárcel insular.
El mandatario dijo el jueves que todas las empresas que se han creado y que están en manos de las Fuerzas Armadas, no suponen un gasto por parte del Estado sino una inversión que, a la larga, será rentable para México.